El cirujano plástico, en la liposucción tradicional, tras haber realizado las fotos en la habitación de la clínica, prepara al paciente para entrar en la sala de operaciones. El cirujano palpa y presiona con sus manos los tejidos adiposos infiltrados de solución salina; simultáneamente, con las cánulas inicia la aspiración de la grasa retenida sobrante. De esta manera, crea un modelo de la silueta fiándose tan solo de la sensibilidad de sus manos, sin ningún soporte de tipo métrico/científico.
Con el método Lipovisor™ (HDL, High Definition Liposuction) el cirujano realiza una escáner tridimensional exacto con el escáner 3D incorporado en Lipovisor™. Con el sensor de escáner de la adiposidad, Lipovisor™ obtiene los espesores en milímetros y en centímetros de todas las zonas diseñadas que se van a aspirar en la sala de operaciones.
En el modelo tridimensional del paciente, el cirujano selecciona las zonas que va a escanear, asignando un nombre a cada una de ellas. Cada zona se selecciona mediante el sensor Lipovisor™. A medida que se escanea la zona, adquiere una coloración que varía según el estrato de grasa presente bajo la piel.
El sensor Lipovisor™ obtiene los datos del espesor de la adiposidad, en milímetros y centímetros, en las zonas diseñadas del cirujano. El nuevo equipo Lipovisor™ dispone de un sistema que memoriza todos los datos detectados en el cuerpo desde el preoperatorio hasta el postoperatorio.
Solicite siempre a su cirujano una copia impresa del informe de toda la intervención o solicite que le graben todas las imágenes tridimensionales del informe en un USB.